Luego de la caída de Perón, en 1955, José Asunción Flores, el creador de la guarania, le comenta que lo único que salvará al país será el comunismo, y decide afiliarse al partido. Esto, como él mismo lo dice, no le ayudó para nada en su carrera artística, y en cambio lo marcó para siempre y ya durante el gobierno de Onganía tuvo que exiliarse por primera vez.
En marzo de 1974 le pusieron una bomba en su casa que destrozó puertas, ventanas y vidrios. Luego amenazas telefónicas, otra bomba, y el incendio de su coche con la guitarra en su interior. Por último le intimaron a dejar el país en 48 horas o ser condenado a muerte por "traidor a la patria". El 29 de setiembre de 1974 abandonó el país radicándose durante seis meses en Méjico y casi cuatro años en España. Mientras tanto se hicieron desaparecer todos sus discos editados hasta ese momento.
Armando Tejada Gomez, un gran amigo, escribió una de sus biografías hasta el año 1976, de la cual parte de esta reseña toma datos históricos. Horacio Guarany relataba por teléfono desde el exilio algunos datos, y el excelente poeta todo lo demás.